Las chicas de la fiesta
Mi historia

Desde mi primer rollo hasta el momento en que me case tuve muchas amigas y novias, follamigas, etcétera Una de ellas en cuestión era como digo una “salida”, puesto que desde el instante en que empezamos a salir hasta el momento en que al fin despegamos, nos llevamos cuando menos 6 mese… meses que no pasamos de los besos y magreos… mmm. Ella se llamaba Maite, hermana de uno de mis mejores amigos.

Su velocidad para enrollarnos en cualquier lugar era más que peligrosa, donde sus progenitores llegaron a sorprendernos más de una vez. Yéndonos de las manos cuando en una ocasión en su casa cuando se fueron sus progenitores, empezamos a besarnos y a meternos mano, manos que no deje de metérselas bajo su jersey amasando sus enormes pechos. Donde tomaba la iniciativa en bajarme los pantalones y calzoncillos y tras sacarme la polla fuera… mmm, se la introducía en su boca y empezaba a comérmela tal y como si su vida fuera en ella.

Ese día para suerte nuestra nos sorprendió su madre en lugar de los dos o bien su padre, nos cogieron con la mano en la masa… para ser preciso la cogieron con mi polla en su boca… mmm. No la escuchamos ni entrar… mas si su grito, echándonos una bronca de huevos, llegando e inclusive a insultar a su hija, diciéndole que no deseaba una barriga en su casa, no deseaba que dejase los estudios, etcétera y amenazándome con contárselo a su marido, terminando por expedir a su hija a su cuarto mientras que llamaría a su esposo.

Recuerdo que me fije que de la forma en que estaba sentada, podía verse por los pliegues de la falda sus extensas piernas… mmm. Dándose cuenta y echándome un sermón como que podría ser su madre, mas sin importarme sus palabras y viendo que su marido me afirmaría de todo, no se me ocurrió otra cosa que sacarme mi polla fuera y empezar a masturbarme delante de ella.

Se quedo callada… sorprendida escuchar lo que hacía, soltó el teléfono y se me acerco, muda extiendo su mano hasta cogérmela y empezó a masturbarme. Aprovechando por acariciarle la espalda y magrearle el trasero, esta se inclino y empezó a comerme la polla.

- Dios como la comía la muy hija puta.

Le solicité que se quitara la ropa y esta tras levantarse… se la quito, quedándose en ropa interior… uuuffff (joder, estaba tremenda). Volviendo a sus quehaceres… mmm, tomo mi miembro y prosigo comiéndomela, atragantándose con mi polla… aaahhh, sosteniendo mi miembro por la base y tras ponérmela erguida… mmm, empezó a magrear tanto leño como genitales, lamiendo y siguiendo las venas de mi polla, saboreando mis dieciocho centímetro por 4 de diámetro… mmm.

Aproveche la postura para quitarle el sostén y dejar desnudos sus senos, quedándose en unas blancas bragas a las que mientras que proseguía deleitándose con mi polla, no deje de acariciar sus nalgas sobre estas… aaahhh. Descubriendo desde el reflejo de una de las puertas de cristal del mueble de enfrente, como esta se estaba masturbando… mmm, tenía una de sus manos en las bragas y por el movimiento de la lona no es preciso meditar mucho lo que estaba haciendo… mmm. Puesto que por el semblante que se apreciaba por el reflejo estaba en la cima, menudo dedazo se hacía. Terminando esta por soltarme una vez saco de su boca mi polla…

- “Quiero joder yaaaa… aaahhh, la necesito dentro… ooohhh”

Tras quitarse sus bragas, se pongo a horcaja… poniendo sus rodillas reposar a los dos lado de mi sobre el sofá, tomando con velocidad mi miembro y tras restregárselo misma por sus labios vaginales… mmm. Se la puso en la entrada de su agujero vaginal, mire sus ojos y eran la de una mujer agobiada, viciosa y caliente… mmm. No afirmó nada solo se dejo caer de manera lenta mientras que pongo sus manos en mis hombros… apoyándose, tome sus caderas como asistirla hasta el momento en que se la introduzca absolutamente, soltando dos gemido y no dejando de suspirar, os puedo asegurar que su semblante era un poema al tenerla toda dentro de ella… aaahhh, mientras que deje abandone sus caderas y me satisfacía con acariciar sus senos… mmm, magreándoselos a conciencia y chupando sus pezones… uuuffff.

Quedándose apenas unos minutos quieta… saboreando el grosor de mi leño dentro de ella… mmm, empezando a moverse de forma lenta, marcando el compas y también ir acelerando conforme gozaba cada vez más y más, mordiéndose los labios como no delatarse… mmm. Obteniéndose su deseado clímax y ruego un cambio de postura, justificándose por el dolor de sus rodillas y de paso que sea quien ahora hiciese ejercicio… ooohhh.

Ayudándola a ponerse como respaldarse sobre sus rodillas y manos, explicándole que la postura es la del perrito… cosa que me aceptó que la conocía, soltándome…

- “Soy ya mayor… mas no lo bastante para no saber qué postura es, además de esto espero que sepas donde la debes introducir… mmm”.

Cojo mi polla y tras ponerla en su coñito… empujo, introduciéndosela de un solo empujón y empezar a embestirla, mientras que esta gime… aaahhh… ooohhh… aaahhh. Me agrada ver como sus enormes senos botan como campanas al compa de mis embestidas… ooohhh… aaahhh… aaahhh… aaahhh, no pudiendo evita magrear uno de sus senos mientras que no dejo de penetrarla. No puedo eludir sonreír mientras que veo su cara de viciosa… mmm, no puedo gozar de ver ese semblante de zorra caliente… ooohhh. Gozando más al verla hacerse de nuevo un dedo… uuuffff, verla mientras que la penetro como juega con su dedo sobre su vulva mientras que gime y suspira… aaahhh… ooohhh, entre jadeos me suelta…

- “Cuando coño te marchas a correr… aaahhh”.

Callo y no dejo de embestirla, sacándosela sin informar y de un empujo le hago caer cara un lado, me mira con extrañeza y desconcierto. Mientras que sin explicación alguna se la vuelvo a introducir, moviéndome salvajemente como ánima lleva el demonio y acercándome la tomo por sus cabellos hasta conseguir besarla, cuya consecuencia de este acercamiento es la penetración más profunda y entre aullidos me hace saber que se marcha viniendo. No pudiendo soportar más y mareado la saco de su interior, apuntando a su pubis inicio a soltar chorros de blanca leche… aaahhh, mientras que me llama… vencedor.

Se levanta recoge sus prendas y me hace saber que se marcha a enjuagarse, dándome permiso de subir al dormitorio de su hija y darle las buenas noches.

Recuerdo que subo a despedirme de mi novia, paso por delate del baño y observo a la madre de mi novia desnuda en la ducha… mmm. Mi polla vuelve a solicitar guerra ante semejante visión, mas me contengo y tras llegar a la puerta del dormitorio de mi novia, voy abriéndolo poquito a poco involuntariamente hacer estruendos. Descubriendo a mi chavala absolutamente desnuda… con sus bragas de osezno incluso en sus tobillos… haciéndose un dedo, de manera silenciosa avanzo mientras que esta continúa con sus ojos cerrados, frotándose con los dedos de su mano derecha sus labios vaginales… mmm, emitiendo gemidos si bien por el volumen pero semejan suspiros… ooohhh.

No pierdo detalle de de qué forma mi novia se hace un dedo… no pierdo el hilo de de qué manera se da placer, ayudándose hasta con su otra mano mientras que ya no se frota de arriba cara abajo… sino más bien ahora lo hace en círculo, frotándose sobre todo sobre su vulva… mmm. Mete sus dedos… hasta 2 de ellos… uuuffff, no puedo más pienso mas debo contenerme… mmm. Mi polla incluso sabe a los fluidos de su madre… mmm, viendo como mi novia aparta sus labios vaginales siento que es mi oportunidad… ooohhh. Dejándome cae y sin aviso previo logro introducírsela… ooohhh, llegando a taparle la boca con mi mano como eludir un grito por su lado, inquieta y atemorizada inicialmente… va sosegándose conforme se da cuenta que soy , gozando de mi polla dentro de ella, gozando de la penetración… ooohhh.

Calla no afirma nada… no comprende de como coño estoy en su dormitorio, terminando por preguntarme…

- “A gozado mi madre. Le has dejado satisfecha”.

Descreído le miro… mientras que progresivo penetrándola, no comprendía de de qué forma ha sabido que he estado con su madre, no deseaba preguntárselo… no deseaba delatarme, solo calle y prosiga embistiendo. Siendo la que me lo confiesa…

- “Desde acá se escuchaba a mi madre vocear, desde acá he escuchado de de qué forma ha gozado y te puedo asegurar que con mi padre no lo hace. Con mi padre no dura tanto como ha durado el día de hoy contigo, de ahí que te he preguntado si mi madre ha disfrutado”.

Tras conseguir los dos el clímax al tiempo me dejo caer sobre la cama, me siento fatigado y abrazándola me quedo dormido, así que se despidió. Entre zarandeos